Vivimos en un mundo en el que la cantidad de material publicado en Internet puede no ser infinita, pero parece que lo es. Estamos en la era de la navegación más que de la búsqueda dirigida. Con esto en mente, hemos diseñado un espacio pensado para ser abierto y versátil. 
El programa del edificio se organiza en una serie de plataformas horizontales e irregulares y planos inclinados, que imaginamos como superpuestos. Refleja una forma de entender los campos contemporáneos de investigación intelectual contemporáneos: abiertos, superpuestos y no jerarquizados. Los pliegues de los planos permiten crear espacios de doble y triple altura. 
La biblioteca se sitúa en el mayor espacio público de la ciudad, justo enfrente del edificio del Parlamento de Johan Sigfrid Sirén. Nuestro diseño para la biblioteca propone mostrar a los ciudadanos de Helsinki leyendo, navegando por internet, escuchando música, tomando un café, tocando el piano... justo enfrente del corazón de la vida política del país, y en el extremo del nuevo parque Töölönlahti. Nos interesa especialmente la intensa relación visual entre el parlamento y la biblioteca - entre el espacio de gobierno y el espacio cultural.